Costilla de Adán (Monstera Deliciosa)

El mantenimiento de la Costilla de Adán, también conocida como Monstera Deliciosa, incluye los siguientes cuidados:

Riego: La Costilla de Adán no es una planta muy exigente en cuanto a los riegos y la humedad. Se recomienda regar la planta cuando el sustrato esté seco al tacto, aproximadamente una vez por semana.

Iluminación: La Costilla de Adán prefiere una ubicación luminosa, pero sin exposición directa al sol. Se recomienda colocarla cerca de una ventana donde reciba luz indirecta.

Humedad: La Costilla de Adán es una planta que aprecia la humedad ambiental. Se puede pulverizar agua sobre las hojas para aumentar la humedad.

Sustrato: La Costilla de Adán requiere un sustrato bien drenado. Es importante evitar el encharcamiento del sustrato para evitar el pudrimiento de las raíces. Fertilización: Se puede fertilizar la Costilla de Adán con un fertilizante líquido para plantas verdes, aproximadamente una vez al mes durante la primavera y el verano. Es importante seguir las instrucciones del fabricante para evitar sobrefertilización.

Poda: La Costilla de Adán no requiere podas frecuentes, pero se pueden eliminar hojas secas o dañadas para mantener su aspecto estético.

Ambiente: La Costilla de Adán prefiere un ambiente cálido y húmedo. Evitar la exposición a corrientes de aire frío y proporcionar una temperatura adecuada para su crecimiento.

Toxicidad: Es importante tener en cuenta que la Costilla de Adán es tóxica para perros y gatos, tanto en sus hojas como en sus raíces. Se debe mantener fuera del alcance de las mascotas.

En resumen, el mantenimiento de la Costilla de Adán incluye un riego moderado, una ubicación luminosa pero sin sol directo, un sustrato bien drenado, y una fertilización y poda según sea necesario. Además, se debe tener en cuenta la humedad ambiental, evitar corrientes de aire frío y tener en cuenta la toxicidad de la planta para las mascotas.